Yo quiero estar de la cabeza.

Las cosas están marchando mejor, aunque lógicamente hay otras que todavía siguen igual.
Pero estoy de diez. Además, estoy aprendiendo a no hacerme demasiado problema por todo. Hay que dejar la exageración y el pesimismo de lado a veces. Y más si en unas horas te vas a Bariloche con tu curso! Já, va a estar genial.
Hoy ya no fui a la escuela. Bah, ayer tampoco, aunque la idea sí era ir. El tema es que estaba organizado el típico desastre, tirando huevos, harina, petardos, bombas de humo y de olor, y los directivos se enteraron. Llamaron a las casas de cada alumno de tercero, y dijeron que "ni nos acercaramos" a la escuela, si no nos queríamos comer 20 amonestaciones y una buena suspensión. Flor de reto ligué yo, y eso que debo haber sido la única ganza que no llegó ni a salir de su casa.
En fin, ya nos habíamos sacado las ganas el miércoles, así que mucho no importó. Ojo, no son cosas graves. No se rompen cosas, ni es peligroso. Hacemos ruido y nos reímos un rato, nada más. Sino, no me prendería.
Así que, desaparezco por unos hermosos días, y me voy a Bariló, a disfrutar con mis amigos. Al principio no tenía muchas ganas (la buena onda, los cantitos boludos, los gritos y los saltos, definitivamente no son lo mio), pero ahora ya le estoy tomando cariño. Deséenme suerte!